Algodones, Verdes y Lampos

Estate. Quieto. En el raudo bienestar del tiempo. No te sumerjas. Las aguas son verdes. Parecen una delicia. Te atraen. Pero mienten. -Malditas aguas mentirosas-. Cuanto más hundes tu mirada en ellas más las necesitas y más intangibles se encuentran. Son droga para tus sentidos. Se te antoja chocolate derretido en fresa. Se te antoja, peligroso, imprudente. Se te antoja.

Duele no poder sentir. Tanto como ver que la inspiración muere. Sangra. La sangre y el algodón es bello, sobre algodones quiero dormir. Que se empapen de mi derrame, de mi quejido en el pecho. Que se atormenten con joyas verdes que hieren. Y que rojo y  blanco, ardido y trémulo quede mi lecho. Que mi rostro duerma en el diluvio de los astros perdidos. De los astros más blancos. -Oh Dios que contigo sueño, si desapareces todo será más fácil.- (O simplemente dejará de ser). Putos días perdidos. Putas almas muertas. Putas vidas sin vida y muertes grávida de gravideces. Putas injusticias. Putas lagunas verdes. Putas tentaciones. Que convierten el verso bello, en verso roto, en aire dócil. Puto mundo que gira. Puta incomprendida naturaleza humana, inalcanzable, obtusa, olvidada... Para nosotros, los putos portadores de ella, con sus putas mentiras y sus putas verdades... ¡Ay sus verdades, cuánta sangre sobre los algodones derraman!

Sobre los algodones quiero morir. Quedarme bien yerto. Derretirme... Blanco, pálido, repálido. Y que el mundo siga girando, con sus estrellas, sus cometas y sus astros. Que lo haga, sin razón lo suficientemente racional como para comprender que le tengo miedo a los días soleados. Porque me recuerdan que son el reflejo del mar, y que éste es azul, nunca verde. Malditas aguas mentirosas. Malditas mentiras piadosas. maldita ignorancia, maldito destino... Y que haya más días sobre los que alumbrar la palidez de la luna y menos que recuerden que las falsas verdades siempre fueron mentiras.

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muchas gracias por comentar